Degustación de vinos españoles

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Qué mal vivimos

Ayer nos invitaron, como miembros o colaboradores de la diplomacia española, a una degustación de cuarenta y cuatro vinos denominación de origen españoles. La gran mayoría de los de Ribera del Duero, porque estaba organizado por la Cámara de Comercio de Valladolid junto con el ICEX. Concretamente con la Oficina Comercial de la Embajada de España en São Paulo. Pero no faltaban Riojas, unos cuántos, y gaditanos (Osborne y compañía).

La cosa consistía en ponerse ropa bonita y plantarse allí diciendo que veníamos de la embajada. Luego te daban una copa con la que te quedabas y luego, básicamente, empezar a pimplar vino bueno de gañote cosa mala.

Además, claro está, nos las arreglamos para avisar a todo el mundo y conseguir invitaciones para el resto de pandillita española que andamos haciendo cosas malas por Río de Janeiro. Así que, pasado un rato, un grupo de diez españolitos y, en algún caso, consortes, nos dedicábamos a gorronear que si un vino Navarro, que si otro de la Rioja alavesa, que si un Alvairinho, que si un Osborne.

Yo no entiendo mucho de vinos. Pero cuando un vino está bueno, pues se nota, claro. Y encima con quesitos y jamoncito. Pena que éstos no eran españoles. Pero tampoco estaban malos. Había Brie, Parmesano, algunos ahumados...

Bah, que vivimos muy mal vamos.

Para colmo de los colmos, nos fuimos haciendo coleguitas de los que venían representando a las distintas bodegas y, más o menos, las botellas que se quedaban sin abrir, nos las iban dando. Así que nos hicimos con dos o tres cajas, en total unas catorce o quince botellas de vino.

Tiene tela...

Por supuesto, después de tanto cachondeo vinícola, nos fuimos para Lapa, como no podía ser menos. Aprovechamos para enseñarles el Rio Escenario a los paulistas que habían venido como organizadores. Colegas todos de la Oficina Comercial de allí. Tocó echarse unas risas también.

Hoy tenemos la continuación de la visita de paulista e iremos a un concierto de Chico Buarque. Ya hablaré de éste, pero adelanto que viene a ser como un Sabina. O sea, un cantautor super conocido de aquí que cada vez que da un concierto, llena todo. Y las entradas se agotaron en tres horas. Nosotros no conseguimos (bueno, tampoco intentamos, la verdad). Pero lo guay de todo esto es que lo que han hecho por lo visto es colocar una pantalla gigante allí al lado mismo, también en Lapa (joe qué cansino con Lapa, lo sé), e iremos por allí mismo, que habrá bastante gente.

No sé en qué momento voy a hacer la maleta para mi inminente viaje a Argentina. Mañana por la noche. Mi intención es traerme las cosas directamente al curro, con lo que no tengo mucha opción. Tendré que hacerla hoy cuando llegue a casa después del concierto.

Ya escribiré más

Bjs

Pedrão

Conciertazo en la playa

El domingo hubo un macroconcierto en la playa de Copacabana. La artista se llama Ivete Sangalo. Es de Bahia. Muy de bloco carnavalesco del carnaval de Salvador de Bahía. Sus Tríos Eléctricos, que es como se llaman los camioncitos con música detrás de los que te colocas en plan fiesta en dicho carnaval cuestan ochocientos cuarenta reales. Unos trescientos euros. Tócate la nariz.

Pero en Río nos lo montamos mejor que en Salvador. Jeje. Aquí directamente alguna marca de lo que sea se le ocurre conmemorar algo, o directamente el ayuntamiento decide que es un buen momento para echarse unas risas en la playa y monta un pedazo de escenario para, todo el que quiera, de gratis ir a ver a su artista favorito.

Así había ido a ver, la última vez, a un macroconcierto organizado por el propio ayuntamiento para felicitar a los Jorges en San Jorge. Y fueron cuatro Jorges famosos a ponerse las pilas allí junto a todo Río. A ver si me acuerdo de memoria de sus nombres: Jorge Benjor, Jorge Aragão, Jorge Bercilo y Jorge Mautner, creo. Bueno, eso fue el veintitrés de abril y ya había hablado de ello.

Pero este domingo, como digo, Ivete Sangalo. Amadísima por tod@s. Y el patrocinador: OMO, marca de detergente en polvo. Para celebrar los cincuenta años de la compañía. Así.

Es como si Mimosín cogiese en España y pusiese a... no sé... Alejandro Sanz en la playa de Madrid... uhmm... o la de Barcelona mejor, y, ale, para todo el que quiera.

Esto mismo, elevado a la milésima potencia, se dio, por ejemplo el año pasado, cuando los propios Rolling Stones deleitaron de gratis al pueblo carioca en la misma playa. Pagado por el ayuntamiento y porque sí, porque era carnaval. Ole! (o debería decir Oba!).

Como siempre, y creo que ya canso, por mucho que su música sea un poco diferente, porque se trata de Axé, que es lo que triunfa en Bahía (muy Carlinhos Brown), acabó con todas las canciones de siempre, que si el País Tropical, que si alguna bossa nova (eu sei que vou te amar). Por cierto: Corazón Partío de Alejandro Sanz no faltó (¿?¿?). Así.

Sí, es que la tal Ivete Sangalo ésta tiene familia española. Y entonces le gusta Espanha y que sí, que va siempre que puede y bla bla y que si la paella y los toros y el carnaval de Cád.... ah, no, eso no lo dice. Y entonces se curró un dueto con Alejandro Sanz allá por noviembre en el propio Maracaná. Y desde entonces, pues parece ser que incluye la de Corazón Partío en su repertorio.

Pues eso, que un fiestón.

Me he comprado un pandeiro. Sí. Uno baratucho y bien malo. Para aprender. Todos los martes y jueves seguimos yendo a la Casa Rosa y quiero ver si lo voy pillando. Ya me pillaría otro un poco mejor si veo que la cosa mejora. Mola.

Y de aquí a nada, el viernes, me voy a Córdoba. Joe, se me juntan los planes. Ya ves... un estrés...
Nada más por hoy.

Cumprimentos,

Pedrão

Saliendo del catarro

Ha sido una semana durilla con tanta actividad. Normalmente no lo sería, pero con el trancazo que tenía encima, con perdón, se ha hecho al final un poco cuesta arriba. Ayer viernes por fin decidí a irme al médico, quien me recetó paciencia y paracetamol (las dos con p).

Pero vamos, el paracetamol es lo único que está ayudando a mi catarro a irse. Yo no le ayudo ni un poco. Ayer salimos como cualquier otro viernes y no me cuidé ni un poquito. Bueno, del frío sí (está haciendo fríooo (emm... sí, 18º)). El caso es que me he comprado un jersey con cremallera bastante chulo. Vamos, no sé. Me mola. Y me molo con él.

El caso es que lo que más estaba necesitando, claramente, era sueeeeeño. Es decir, dormir sin preocupaciones. Y vaya si hoy lo he conseguido. ¡¡A las cinco y cuarto de la tarde me he despertado!! Así estoy ahora, que me ha llamado Patricia porque hay plan en casa de Asier para luego salir por Ipanema y he dado un respingo de alegría del sofá. Apetece. Me voy de aqui a media hora.

Ayer fue el cumpleaños de Ricardo. Le mandé una postal por internet. Y hoy el de mi hermano, con quien he hablado un ratillo por el messenger. Jo, ganas de ver a todo el mundo. La semana que viene en Argentina con mi padre va ayudar a matar un poquillo esa nostalgia.

Me hace un montón de gracia Aurora últimamente. Ha empezado las prácticas tuteladas en farmacia y cada día tiene mil anécdotas de los que pasan por allí pidiendo unas y otras cosas. Después de toda la vida estudiando, ahí la tienes, tó mayor ya trabajando :D. Ayyns!!

Bueno, en realidad, no mucho más que contar.

Beijos!

Pedro

Semana cultural¿¿??

Vamos a hablar un ratito. El sábado pasado estuvo muy bien. Es difícil que nos juntemos todos. Y, de hecho, no fue así. Pero sí que casi todos fuimos al Democráticos a rememorar tiempos de recién llegados cuando lo flipábamos con aquel garito. Bueno, en realidad, nos sigue gustando mucho mucho.

Aprovechamos porque estaban de visita algunos amigos y amigos de amigos de Maitane. Becarios del Gobierno Vasco, Cámara de Madrid y del propio ICEX que habían venido de São Paulo y Santiago de Chile. Nos lo pasamos muy bien. Bailoteo, risas, fotos y demás. Pero además, cuando acabó Lapa, muchos, en lugar de irnos a casa, nos cogimos una Van y nos fuimos al Emporio, bar de Ipanema del que alguna anécdota ya he contado también en este blog.

Pero espera, que cuando cerró ese, lejos de dirigirnos a casa, otros muchos también seguimos para Leblon. Pizzeria Guanabara. Que cierra sólo una hora al día, de siete a ocho de la mañana. Ahí ya sí que sí. Cuando cerraron ahí, no nos quedó más remedio que irnos para casa. De todas formas, lo más importante y gracioso de la noche fue eso, el estar de nuevo, y tras mucho tiempo, en el Democráticos en Lapa. Habrá fotillos, supongo.

Lo de semana cultural viene por dos actos a los que nos ha dado por ir ayer y hoy.

Por orden cronológico.

Brasil es único en todo. No me lo creía cuando me dijeron que íbamos a ir a un desfile de modelos de una firma que se está lanzando de ropa para prostitutas. Así de, cuanto menos, curioso. La marca se llama Daspu, abreviación de Das Putas (De las putas). Todo ello englobado en un acto cultural celebrado en un cine en el que se acabaría pasando la película Princesas, de Fernando León. Teníamos invitación de prensa a través de Lorena, quien estaba acreditada para el evento por su curro como reportera en la Agencia EFE.

Bueno. No estuvo mal. La peli no la había visto y me gustó mucho. Muy Fernandoleoniana, claro. Sin mencionar la cata de champán estupendo que nos tocó degustar antes del inicio de la peli.

Pero eso, que Brasil es único en todo. Hacen negocio de cualquier cosa. Y si hay que sacar una firma de ropa para prostitutas, pues se saca.

Y luego lo de hoy. Simplemente que Dani había conseguido a través del consulado unos pases de gratis para asistir a uno concierto de un dúo de guitarra clásica formado por dos españoles. Así sin entender mucho del tema, muy bueno. Vamos, que me gustó bastante. Ahí fuimos Chechu, Dani, Zé, Pablo y yo. Y luego cenorrio con rodizzio de pizzas en un restaurante cerca de casa.

Por cierto, está decidido. Nos vamos a São Paulo en junio. Como mínimo Zé y yo. Y quien quiera venir, bienvenido será. Por fin le voy a devolver las visitas a Raul, el becario de informática de allí, quien ya ha visitado Río como cinco veces este año por ninguna yo.

Va a ser mi tercer viaje medio grande de junio. Ya sabes: Córdoba, Manaus y ahora São Paulo.

Las clases de percusión, muy bien. Ya va sonando alguna cosita y el profesor dice que por lo menos vamos acentuando donde hay que acentuar. Nos echamos unas buenas risas, que es lo importante. Además, he empezado justo antes cada martes y jueves, clase de pandeiro. Como una pandereta, pero más seria y más grande. Parece muy difícil. Y creo que me debería comprar una, para poder practicar un poco. Pero bueno, veré primero a ver si me gusta y me entusiasmo un poquillo.

Hoy ha sido el cumpleaños de mi padre. Pues nada, ¡¡¡muchas felicidades!!! Qué bien, en apenas poco más de dos semanas, le felicito y le doy un abrazo en persona en Córdoba. Qué bien.

Nada más por hoy.

Saudações

PC

La Casa Rosa

De la Casa Rosa estoy seguro de que ya he hablado alguna vez, ya que los domingos por la noche lo que se organiza allí es una feijoada donde por siete reales, poco más de dos euros, te pones hasta arriba del citado plato. Y antes, durante y después, roda de samba, es decir un grupillo de samba acompañando la comilona y tocando los éxitos más conocidos de dicho ritmo brasileiro.

Pero por lo que nos hemos habituado últimamente a ir es porque se ha organizado en plan asociación cultural una serie de talleres superbaratos con los que se pretende financiar, interpreto, la reforma de dicha casa.

La casa es un antiguo palacete situado en la zona de Laranjeiras que antiguamente era un prostíbulo de lujo, como muchos habrán podido suponer dado ese nombre tan rocambolesco.

El caso es que hay talleres de varias cosas bastante chulas que nos han llamado la atención. Al principio era en plan, qué guay, cuántas cosas para elegir. Pero ahora ya es en plan, buf... no me atosigues, que no sé qué elegir; todo mola.

Por lo pronto, Zé y yo nos hemos apuntado a percusión de escuela de samba. Dicho pa entenderlo fácil, se trata de batucada. O lo que suena al compás de los desfiles de carnaval en el sambódromo. Por ahora, las clases son muy tontonas, en plan un, dos, un, dos, un, dos... Pero mola estar ahí en medio cuando los demás hacen un montón de florituras y tú apenas haciendo tu ritmito fácil. Pero eso, que queda bien.

Y luego está la aula anterior, la de pandeiro. También mola y podríamos compaginar. La verdad es que es una flipada ver al profesor haciendo movidas él sólo con el instrumento. La decepción viene luego cuando tú, con el subidón de haberle visto a él, lo coges y ves que no te sale ni un cero coma uno por ciento de lo que él hace. Pero bueno, paciencia. Eso, igual nos apuntamos.

Y las chicas, concretamente Patricia, María y Lorena (y ayer una alemana amiga de ellas hizo una clase experimental) están haciendo clases de Samba Gafiera, es decir, baile de samba en parejas. Yo fui un día a ver y hasta me hizo gracia, pero coincide en horario con batucada, con lo que no da para ir también a eso.

Pero bueno, eso es sólo un ejemplo, luego también hay percusión africana, capoeira, guitarra de siete cuerdas, pintura y otras cosas.

Joe, qué dilema... no sé con qué me quedaré al final.

Porque la capoeira se me ha acabado en el gimnasio. Básicamente teníamos una bolsa gratis de seis meses en el mismo por estar apuntados a la escuela de lenguas. Así que eso, ahora estoy sin capoeira y no me gustaría dejarlo así definitivamente.

En fin, ya veremos con qué nos terminamos quedando de todo.

Fin de semana. Vienen unos amigos de Maitane. Algo tocará hacer con ellos. Y aprovechar lo que se pueda la playa, que se nos está acabando el calor y con él se nos está quitando el moreno. Qué cosas.

A lo de Manaus, que es el fin de semana del nueve de junio, amazonas, paseos en canoa, cocodrilos, serpientes, pirañas (uuuuuuuuuhhhhhhhhhhhhhhh... no sé qué hago yo en ese viaje, la verdad), se nos ha apuntado una comitiva de São Paulo. Mola. En total somos seis.

Y justo el fin de semana anterior tengo el viaje a Córdoba (Argentina) para celebrar con mi familia de allí el octagésimo (o como se escriba) cumpleaños de mi abuelo. Mi padre va y todo desde Badajoz. Apetece un huevo. Además, me he pedido un día de vacas para alargar el fin de semana, así que, esa semana queda como sigue:

1 de junio, viernes -> Río - Córdoba (con escala en Porto Alegrue (buf retrasos mil))
5 de junio, martes -> Córdoba - Río de madrugada para llegar directo a currar (y tarde)
6 de junio, miércoles -> Río - Manaus (comienza el macropuente del Corpus Cristi)
11 de junio, lunes -> Manaus - Río también de madrugada para llegar directo al curro

Menudo trajín. Pero vamos, no me quejo, mola.

Saudaçoes.

Pedrão

¡¡Frío!!

Pues en realidad apenas estamos en mayo, lo que equivale a noviembre y ya está haciendo un pequeño poquito de frío. No me lo esperaba. Y en realidad la temperatura ni se acerca a la que haría en España en unas fechas homólogas. Entre veinticuatro de mínima y treinta y dos de máxima. Pero resulta que aquí cuando hace veinticuatro grados, como ahora mismo, no sé por qué fenómeno será, hace una rasquilla que hasta lo pasas medio mal y todo.

Supongo que será por la humedad y tal. Me recuerda un poco a Figueira da Foz, lugar portugués donde todos los años mis padres veranean en la primera quincena de septiembre, y donde cuando se va el sol y se levanta la bruma, hace una rasca de aquí te espero. De esta que se te mete en los huesos y tal. Pues eso, parecido.

Así que me he dado cuenta que me va a hacer falta algún pantalón largo en plan sport que pueda utilizar en una noche normal de salir a tomar una cocacola. Y espérate, que he visto un jersey de canalé, o como se escriba si es que es una palabra francesa, con cremallerita hasta el pecho que estoy pensando seriamente en comprármelo. Me queda guay, creo. Lo único es que no es nada barato. Ochenta y cuatro reales, unos treinta euros. Ni carísimo tampoco. Precio estándar. Pero es que me ha molado. El otro día me pasé cuarenta y cinco minutos en la tienda probándome diferentes tallas y colores. Bueno, también es verdad que hacía tiempo porque habíamos quedado y tenía un rato tonto en el que no sabía ni qué hacer.

Acabo de llegar de casa de Pablo, donde ha conmemorado un poco su cumpleaños. Risas, como siempre; guitarras, como muchas veces; caipifruta casera, como acostumbra a convidarnos cuando nos pasamos por su casa. Buen rollito. Planes, como siempre, de pegarnos algún viaje. Para un lado o para el otro. A ver qué sale de todo lo que se ha hablado. Han sonado lugares como Recife, Salvador de Bahía, Manaus (aunque éste está confirmadísimo), Buenos Aires y otros.

De lo que venga, iré contando.

Estoy leyendo El Alquimista de Paulo Coelho. Por cierto, coelho significa conejo. Como curiosidad. Ya me lo había leído en español, pero hace mucho. Así que en Portugués me vendrá bien para, por un lado rememorarlo, ya que recuerdo que al menos me moló, y por otro lado para practicar la lengua, con perdón.

Nada más por hoy.

Saudaçoes.

Beijos

Pedrão

Fotos en Maracanã

A continuación, las fotos que nos hicimos en el estadio de Maracanã el domingo pasado.

Aquí todos después de que el partido ya hubiese terminado. Flamengo campeón. Maitane besando la banderola que Cristiano se había comprado, no tiene precio.



Aquí hasta se puede ver el fervor constante en la grada. Esto en España no se ve... o yo no lo he visto.



Fuimos con algunas amigas de Alejandro que le estaban visitando desde España. Aquí una de ellas, Laura, junto con Maitane, Lorena y María. En total fuimos: Cristiano, Maitane, Lorena, María, Patricia, Pablo, Alejandro y sus tres amigas.



Después de la finalización de la tanda de penaltys. Un espectáculo. :D



El martes fui a jugar al fútbol con Chechu a la Lagoa. Muy tranquilo. No me vi. Tiendes a decidir quedarte en la defensa porque crees que los demás son mejores que tú. Entonces te quedas ahí atrás sacando balones más o menos bien mientras ves que los de adelante, en realidad, no hacen más de lo que piensas que podrías estar haciendo tú. Nada de abrir huecos, abrir la defensa, crear juego por las bandas, por el centro. Nada. Simplemente se dedican a perderla sin pudor ninguno. Y piensas: ¿no podría estar ahí adelante yo en lugar de estos paquetes?

No es tan así, pero vamos, que tampoco es que por ser brasileiros sean la leche jugando al fútbol.

Hoy he ido con María y Patricia a un lugar donde ellas toman clases de samba. De baile. El sitio mola. Es la Casa Rosa, que es un lugar donde los domingos (y otros días) se pone bastante bien. Pero los días de diario lo que hay son clases de varias disciplinas. Además de la samba que éstas hacen, hay capoeira, percusión africana, percusión de escuela de samba... y varias cosas más. Yo me he interesado por alguna cosa... pero principalmente me gustaría hacer la percusión de escuela de samba. De samba, vamos. Así que creo que seguiré yendo martes y jueves a ver por qué movida me termino decidiendo.

Nada más por hoy. Toca irse a la cama.

Bjs

Pedrão

Más fotos de Jeri. ¡¡Y algunos videos!!

Yo con la tabla de sandboarding. El panorama, muy feo.



Lo malo del sandboarding, claramente, es que luego hay que volver a subir. Y ahí no hay telesillas que te vuelven a dejar en lo alto de la montaña, en este caso duna. Ahí se me ve abajo del todo comenzando a subir.



Haciendo el tonto con Patricia. Pero vamos, lo importante, como se puede ver en la propia foto, es el paisaje nuevamente de atrás.



Ahí en primer plano, la comilona que nos pegamos el martes de Jericoacoara. Bueno, a Pablo nos lo dejamos.



Me encantó esta imagen. Es una foto para un cuadro de Dalí.



Y este es el Land Rover que nos dio ese paseo por las dunas. También es el que nos llevó del aeropuerto a Jeri y viceversa.



Venga, y ahora los vídeos

A continuación tres vídeos de un tío que hacía capoeira que daba gusto.







¡El esperado sandboard! Mola este deporte. Aquí se me ve bajando una duna de las grandes.



Pero hasta llegar a ese punto, hubo que pasar muchas penurias y meterse buenas galletas. Aquí un ejemplo de la iniciación al asunto.



Aunque ella no quiere, me veo en la obligación de poner este vídeo de Maitane con toña bastante graciosa. Aunque no refleja la realidad, ya que más o menos también aprendió rápido y bajaba sin caerse demasiado. Jeje... pero es que esta leche es muy graciosa.



Y ayer domingo, tatatachán, hemos ido a Maracaná a ver el partido de vuelta de la final de la copa Carioca 2007. El torneo de pretemporada más importante de por aquí. Bueno de aquí del estado de Río. La cosa consiste en que durante el verano va habiendo campeonatos. Que si la Taça Guanabara, que si el Campeonato estadual y otros. Y la historia es que los campeones de esos dos torneos juegan entre sí el ya definitivo del todo, el Campeonato estadual de Río de Janeiro.

Pues bien, la Taça Guanabara la había ganado Flamengo. y el otro Botafogo. La final de la copa estadual esta fue a dos partidos. Sin contar los goles metidos fuera de casa (más que nada porque no hay fuera ni dentro de casa, ya que todo se juega en el Maracaná y ningún equipo hace de local). Y sin prórroga, directamente a penaltys.

Pues eso, el de ayer era la vuelta. A la ida habían quedado 2-2 tras ir perdiendo Flamengo 2-0. Así que, básicamente, quien ganase este partido de vuelta, ganaba el campeonato. Pues eso, quedaron nuevamente 2-2 y en la tanda de penaltys ganó Flamengo. Sobre todo gracias a su portero, Bruno, que se paró los dos primeros ("Puta que pariu!! É o melhor goleiro do Brasil!! Bruno!!").

El ambientazo que se monta es increíble. Esto no se ve en España. Aquí todo el estadio se pasa gritando todo el partido. Nada de pitos. Cabreos y gente santiguándose todos los que quieras. Pero nadie para de animar en ningún momento.

Mola mucho.

Así que nada, tan contentos, ya que nuestro equipo era Flamengo. Por dos motivos principales: porque fuimos con Cristiano, que es el flamenguista de sangre y, sobre todo, porque estábamos en la parte de la grada de Flamengo. Y, vamos combinar, no comviene ni un poquito animar a un equipo desde la grada del contrario. En dos ocasiones nos tuvo que pillar la policía para decirnos por dónde teníamos que ir a la entrada y a la salida del partido porque nos metíamos con las camisetas, banderolas, etc... en medio de la hinchada ("torcida") del Botafogo.

Y poco más de eso.

Habrá fotos y tal.

Nada más

Saudaçoes.

Pedro

¡¡Fotos de Jericoacoara!!

Vamos allá.

Foto de equipo en medio de las dunas. De izquierda a derecha, María, Patricia, Yo, Maitane y Pablo.



Tirado en lo alto de la pendiente de la duna Pôr do Sol (Puesta del sol). Obsérvese la altura de la misma viendo lo pequeñito que se ve a la gente que está abajo.



Haciendo el chorra en lo alto de otra duna.



Un poco más de risas, pero esta vez con algo de dolor... que levantar a Pablo no es lo mismo que levantar a María.



Playa principal de Jericoacoara. Los pescadores preparan sus redes para salir a faenar por la noche. Al fondo, la duna Pôr do Sol. Muy feo todo.



Foto de equipo otra vez. ¿Parece o no parece la portada de un disco? Jeje



Foto de postal del momento de la puesta del sol. Por un lado, pena que hubiese nubes. Pero por otro, hace un efecto guapo.



Fachada principal de la aldea de Jericoacoara. A la derecha un típico Bugui. A la izquierda, el barco de Chanquete.



Hablando de Chanquete, aquí estamos haciéndole un homenaje. Y que del barco de Chanquete no nos moveran y tal.



Y si te dabas la vuelta, veías esto. Así.



Foto en una pasarela en una de las lagunas que visitamos. No se aprecia, pero el agua estaba supertransparente (de la muerte, o sea).



Foto representativa del estrés reinante. Aquí sí que se ve lo transparente del agua. Por cierto [por favor!!], lo que tengo en la mano es botellín de cerveza, claro.



Otra en las hamacas. Tiene tela



Haciendo el chorra con los pareos (o cangas, como se llaman aquí).



Esta foto me moló. De vuelta a la duna Pôr do Sol para ver la puesta del sol.



Protestando un poco por lo mal que me trata la vida. Íbamos en bugui por esta playa, pero tuvimos que parar porque un coche pequeñito se había quedado encayado en la arena. Así que entre empujón y empujón, con perdón, me hice esta foto.



Sentados tomándonos una de las fabulosas caipifrutas en el puesto de Iván, que es el tío que nos las preparaba. Obsérvese la extraodinaria fealdad de la camisa de Pablo y la mía.



Foto de postal que le dio por echar a Pablo y que a mí me moló. Y aquí que la pongo.



Un amigo que nos hicimos en una de esas lagunas que visitamos



Por supuesto, aquí faltan fotos y vídeos del tema del SandBoarding. Pero bueno, todo llegará. Por ahora, queda esto aquí, que ya va molando.

Cumprimentos.

Pedrao

Se va terminando Jeri

Pues eso. Esto no podía ser eterno. En realidad, ha sido mucho más corto de lo que apetecería. Pero el hecho es que en poco más de tres horas nos estamos cogiendo el Land Rover de vuelta para Fortaleza y mañana por la mañana de madrugada, el avión para Río. Y a trabajar directamente.

Sólo queda darnos una cenita de rigor y, por qué no, tomarnos una última caipifruta en el puesto de al lado de la pousada. De ese puesto no he hablado. Todos los días, antes de salir de fiesta por la noche, nos hemos tomado una caipifruta en este sitio. Sin duda, la mejor que nadie de los presentes ha tomado nunca. Además, el hombre, supersimpático. Siempre con una tele en la que nos pone conciertos en vivo de ColdPlay, Pink Floid y así. Su hijo, que a veces también le ayuda con la tarea de servir las caipis, se llama Ringo.

De todas formas el hecho de que nos vayamos no es el único del día. Hasta hemos disfrutado mucho. Hemos cogido al hombre del mismo Land Rover y le hemos pedido que nos hiciese una excursión a un lugar llamado Tatajuba (leido tatayuba, claro). Para llegar ahí lo bonito ha sido que era todo entre dunas. Pero ya extensiones de dunas hasta donde alcanzaba la vista. Vamos, el desierto puro. En una de ellas, además, también hemos hecho sandboarding. Mola, se podría decir que ya le he pillado el tranquillo de no caerse. Sin giros ni ninguna cosa especial, pero al menos controlando ahí sobre la tabla. Esta duna era enorme; más grande que la del día anterior. Pero el hecho de que fuese mayor no hacía que la bajada fuese demasiado rápida y la subida eternamente cansativa.

Luego hemos ido a las orillas de otro lago donde lo que hemos hecho se resume en tirarnos en hamacas y comernos una buena comida de pez y mariscos por el módico precio de ocho euros al cambio. Contando tres langostas a la plancha, un plato de langostinos y una corbina (ay, será que se llama así el pez ese?). Un espectáculo.

Luego hemos vuelto y, simplemente, hemos estado en la playa con amigos de los que hemos conocido aquí. Patricia y la mejicana, Paola, han hecho surf y todo. Hasta logrando ponerse un poquito de pie.

En fin... aaaaaaaaahhhh!!! Mañana trabajando en Rio, no apetece.

Nada más por hoy.

Beijos

Pedrão