Relajación final en el trabajo
Está claro que el año laboral de esta beca no se puede decir que sea nada estresante. Quitando un par de tareas un poco más trabajosas, me he dedicado a cambiar diariamente la cinta de backup y atender las necesidades puntuales de cada usuario de la oficina.
Pues bien, esta relajación se ha visto acrecentada con la llegada de septiembre, o la marcha del jefe de la oficina. Como se quiera mirar.
Y es que Paloma, la Analista Comercial, de cuya voluntad dependemos ahora en términos de normas a seguir en la oficina, ha sido la primera que ha dicho que vamos a estar y trabajar lo justo. De hecho, el trabajo como tal se ha acabado y todo lo que queda es lo que yo tengo que hacer para que la oficina pueda, estrictamente hablando, dejar de existir el próximo 30 de septiembre.
Al final, todo esto se traduce en que Paloma nos deja entrar y salir cuando básicamente nos da la gana. Hay ciertas cosas que hay que hacer todos los días. Y yo me tengo que dedicar, como digo, a meter cada equipo que deja de ser utilizado por tal o cual usuario en su respectiva caja. Pero después, a casita.
Así, estamos llegando a las nueve y media o diez de la mañana. Y saliendo a las dos y media tres. Y tan felices. Y estamos aprovechando para ir a la playa, porque, encima, está haciendo un tiempazo de escándalo desde hace aproximadamente dos semanas (coincidiendo justo con cuando el jefe se fue de Brasil, por qué será jeje).
Ayer viernes Zé y yo fuimos a un concierto gratis en la Praça XV. Alceu Valença es un pernambucano que hace una mezcla de Forró y Reagge bastante graciosa. La música más famosa que tiene es la de Morena Tropicana, bien conocida aquí, y con más años que todas las cosas.
Ains, lo que no mola nada es que con todo con el que hablas ya lo que te pregunta es "bueno, qué, de preparativos ya, no?". Señal inequívoca de que no queda ni un minuto para que nos vayamos de aquí José y yo. Todo lo que hacemos pasa por decir "pues nada, es la última vez que hacemos tal cosa, o cual otra". Por ejemplo, el jueves en el Baixo Gávea, fue la última vez que todos los becarios íbamos a estar juntos de fiest, ya que ahora unos viajan y otros también. En fin, no puede faltar un toque de nostalgia en este blog en los apenas 15 días que tenemos por delante.
Por otra parte, el sentimiento de querer cerrar los ojos y abrirlos de nuevo para aparecer directamente en mi habitación de Badajoz y que todo haya pasado también está ahí. Porque todo lo que viene es organización de una mudanza transoceánica enorme. Bom, fazer o que, ne?
Mais nada por enquanto. Tava querendo botar o vídeo da gente brincando de bola na praia em Ilha Grande, mas ultimamente a Internet está uma merda. Mas daqui a pouco o coloco, tá?
bjs
Pedrão
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio