¡¡Frío!!

Pues en realidad apenas estamos en mayo, lo que equivale a noviembre y ya está haciendo un pequeño poquito de frío. No me lo esperaba. Y en realidad la temperatura ni se acerca a la que haría en España en unas fechas homólogas. Entre veinticuatro de mínima y treinta y dos de máxima. Pero resulta que aquí cuando hace veinticuatro grados, como ahora mismo, no sé por qué fenómeno será, hace una rasquilla que hasta lo pasas medio mal y todo.

Supongo que será por la humedad y tal. Me recuerda un poco a Figueira da Foz, lugar portugués donde todos los años mis padres veranean en la primera quincena de septiembre, y donde cuando se va el sol y se levanta la bruma, hace una rasca de aquí te espero. De esta que se te mete en los huesos y tal. Pues eso, parecido.

Así que me he dado cuenta que me va a hacer falta algún pantalón largo en plan sport que pueda utilizar en una noche normal de salir a tomar una cocacola. Y espérate, que he visto un jersey de canalé, o como se escriba si es que es una palabra francesa, con cremallerita hasta el pecho que estoy pensando seriamente en comprármelo. Me queda guay, creo. Lo único es que no es nada barato. Ochenta y cuatro reales, unos treinta euros. Ni carísimo tampoco. Precio estándar. Pero es que me ha molado. El otro día me pasé cuarenta y cinco minutos en la tienda probándome diferentes tallas y colores. Bueno, también es verdad que hacía tiempo porque habíamos quedado y tenía un rato tonto en el que no sabía ni qué hacer.

Acabo de llegar de casa de Pablo, donde ha conmemorado un poco su cumpleaños. Risas, como siempre; guitarras, como muchas veces; caipifruta casera, como acostumbra a convidarnos cuando nos pasamos por su casa. Buen rollito. Planes, como siempre, de pegarnos algún viaje. Para un lado o para el otro. A ver qué sale de todo lo que se ha hablado. Han sonado lugares como Recife, Salvador de Bahía, Manaus (aunque éste está confirmadísimo), Buenos Aires y otros.

De lo que venga, iré contando.

Estoy leyendo El Alquimista de Paulo Coelho. Por cierto, coelho significa conejo. Como curiosidad. Ya me lo había leído en español, pero hace mucho. Así que en Portugués me vendrá bien para, por un lado rememorarlo, ya que recuerdo que al menos me moló, y por otro lado para practicar la lengua, con perdón.

Nada más por hoy.

Saudaçoes.

Beijos

Pedrão