Olha que coisa mais linda

Olha que cosa mais linda, blog cuya URL tiene un error ortográfico provocado voluntariamente para conseguir que no estuviese cogido ya por otra persona, es la respuesta a una larga lista de peticiones para que fuese escribiendo un diario online de mis aventuras y desventuras por el año que pasaré en a cidade maravilhosa.

27 marzo 2007

Buzios genial

Pena que aún no tengo fotos. Ayer no escribí porque pensaba que hoy iba ya a tener fotos y vídeos del fin de semana en Buzios, pero por salir muy tarde de capoeira no me dio tiempo a pasar por la casa de Pablo, que es en quien confío mis fotos a través de su cámara cada vez que salimos de viaje.

Pero bueno, lo voy a contar y mañana pongo fotos y vídeos.

Salimos el viernes en un coche y una van. El viaje se hizo un pelín pesado. En el coche íbamos cinco y no había mucho sitio. Tras encontrar la pousada, nos fuimos al centro a cenar alguna cosa. Después encontramos un bar donde había música Rock en vivo y nos quedamos ahí por el resto de la noche. Superdetranquis, claro. Estábamos cansados del viaje y el día siguiente prometía.

El sábado fuimos a la llamada playa de João Fernandinho. Un cala pequeña rodeada de vegetación selvática. Actividad nula la primera mitad del día. Sólo playa y baño. Un calor infernal. La segunda mitad, entre que nos alquilamos un típico Kayak de estos para perderse remando por el mar, palas, etc... se nos acabó el día. Comimos allí mismo en un chiringo. Un bocadillo de un filete de carne hecho allí mismo a la brasa que nos morimos del gusto. Cinco reales. Uno con ochenta euros.

Luego cambiamos de playa. Fuimos a la de Geribá. Más grande y de mar abierto, pero ya era tarde y simplemente nos quedamos en un chiringa-bar montado hasta para tomarse las copas. Pero bueno, fueron apenas dos cervezas y nos fuimos a la pousada a descansar.

Por la noche estuvo bien; cenamos cada cual donde le dio la gana y nos metimos en una discoteca. Y no nos movimos de ahí. De todas formas, tranquilote y pronto nos fuimos para casa, ya que también queríamos hacer alguna cosa el domingo.

Y es que al día siguiente tocaba más playa. Además nos hizo un día espectacular para playa, ya que apenas salía el sol de vez en cuando y hasta llegaron a caer algunas gotitas. Perfecto, porque también hacía un calor de muerte.

Lo más guay de ese día fue que Pablo y yo hicimos esquí acuático. Treinta y cinco reales los quince minutos, aunque al final estuvimos unos veinticinco cada uno. Al principio era un poco frustrante, porque no consigues ponerte de pie y piensas mil veces que menudo desperdicio de pasta. Que no vas a ser capaz de ponerte en pie ni una vez. Pero de repente, como quien no quiere la cosa, lo consigues y una vez arriba es bien fácil; ya simplemente hay que compensar el peso del cuerpo y estirar los brazos.

Lo mío fue esquí. Lo de Pablo fue una tabla tipo show. Es muy muy muy divertido y nos pasamos un buen rato. Ya hemos dicho que cada sitio que vayamos, si hay esquí, lo hacemos.

A todo esto, a la lancha se subió Patricia con una cámara de fotos, la de Pablo. Con lo que habrá fotos y vídeos seguramente mañana.

El resto del día fue hacer tiempo en esta playa y luego en el centro de Buzios. Por la tarde empezó a llover a muerte, pero el viaje lo hicimos muy bien. A la vuelta nos tocó en la van y creo que se iba bastante más cómodo.

Pero bueno, como siempre, una imagen vale más que mil palabras, así que dejamos Buzios esto hasta mañana que ponga las fotillos.

Por otro lado, en capoeira guay. Y no, desde luego, porque esté avanzando mucho en mi aprendizaje, agilidad, flexibilidad, etc... Sino, porque el grupo de peña cada día me cae mejor. Ahora se acerca pascua y aquí, como en Argentina y otros sitios, la costumbre es regalar un huevo de chocolate. En plan Kinder, pero así más grande. Así que en capoeira se ha montado un “Ovo oculto” o Huevo oculto, con perdón. Es decir, ayer cogimos un papelito con un nombre y nos toca comprar un huevo de pascua a la persona que nos ha tocado.

A mí me ha tocado el profesor “Morceguinho”. Vamos, el monitor de la clase. El hombre es más negro que la noche y estoy planteándome pillarle el huevo de chocolate blanco para que contraste con su color de piel :P ¿Se ofenderá? Yo creo que estaría gracioso. A todo esto, nos intercambiaremos los huevos (ehmmm.... ¿debería haber cogido otra expresión para esto?) este domingo en un churrasco en la casa del padre de una de las capoeiristas en Ipanema, para lo cual nos han dicho que pongamos quince reales. Mola

Nada más. Mañana las fotos, espero.

Saudaçoes.

PC

1 comentarios:

Blogger Cristina ha dicho...

Acabo de leer la laaaarga crónica de tu viaje a Madrid, estancia, boda, regreso a Río, mala notica, viajes de fin de semana, planes de futuro y es magnífico que tengas la paciencia de hacer la crónica de cómo se desarrolla tu vida allí. Las prestaciones que da este soporte también me encanta. Antes se escribía con lápiz en un cuaderno con fotos pero ahora con la posibilidad de poner fotos, vídeos y comentarios, compartirlo con tu gente y que no ocupa lugar en la casa es lo más de lo más.¿No?
Además este año brasileño te da mucho para vivir por las experiencias que te proporciona.
¡¡¡Enhorabuena!!!, Sobri
Voy a tomar un vinito en tu honor ¿te parece bien?
Mil besos,
Minina

4:18 p. m.  

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